
Una historia, una vida
Carmen Lyra, seudónimo de Maria Isabel Carvajal Quesada, nació en San José de Costa Rica, en el barrio de Amón, en 1887. Cursó los estudios primarios en el Edificio Metálico1 (en la escuela de barrio Julia Lang). Al finalizar estos se matriculó en el Colegio Superior de Señoritas, donde obtuvo el título de maestra en 1904.
Trabajó en varias escuelas de San José, y en la escuela rural El Montecito. En 1906 entró al servicio del Hospital San Juan de Dios, por vocación propia, en calidad de novicia, sin embargo, su condición de hija natural (su padre se negó a reconocerla) le impidió continuar.
Ese mismo año, 1906, Carmen Lyra comenzó a publicar en algunos periódicos y revistas: Páginas Ilustradas (A Virgilia [su primer relato]), Pandemonium, o Athenea. También en Repertorio Americano y en Ariel. Continuó con su labor de maestra en las diversas escuelas de la zona.
En 1912 fundó, junto con Lilia González, la revista San Selerín (el primer periódico para niños de Costa Rica), que posteriormente dirigiría. Sobre 1915 estableció, ayudada por Omar Dengo, entre otros, el Centro Germinal. Este era un centro —funcionaba por las noches— en el que se dedicaban a instruir a agricultores y obreros.

A través de las palabras
Desafió el pensamiento de la época utilizando sus relatos de ficción. Habló acerca de la lucha de la mujer (Las Madamas Bovary) y sobre la religión (Unas manos que no querían ser blancas). Sobre la doble moral y la desigualdad escribió la serie Bananos y hombres (Repertorio Americano [1931]).
En una silla de ruedas (1916 ¿?) y Las fantasías de Juan Silvestre —sus dos primeras novelas― se publicaron en 1918.
Carmen Lyra incorporó nuevos puntos de vista y aspectos inéditos en la plasmación de la realidad. Identificó la tragedia, la degradación y la injusticia. Denunció la opresión, la explotación económica y el despotismo sin dejar de lado la sumisión, la marginación y el exceso de dependencia.
Revolución
En 1919 participó en la lucha contra la dictadura de los Tinoco. En una manifestación de protesta iniciada por las maestras de San José su discurso enardeció a la multitud, que terminó por quemar el diario del gobierno La Información. Fue Perseguida por la policía, a la cual logró evadir disfrazada de vendedora de periódicos.
Finalizada la dictadura obtuvo una beca para estudiar en Francia. Desde allí viajó a Italia, donde decidió seguir la corriente pedagógica montesoriana (María Montessori [1870 – 1952]). A su regreso en 1921 trabajó como profesora en la Escuela Normal de Costa Rica, encargándose de la cátedra de Literatura Infantil.
Cuentos de mi tía Panchita, la obra más popular de Carmen Lyra, se publicó en 1920.
Carmen Lyra se especializó en la enseñanza preescolar. En 1926 fundó (posteriormente la dirigiría), con Luisa González, la Escuela Maternal Montessoriana, un centro creado para que los niños de escasos recursos de la ciudad de San José tuvieran acceso a una educación preescolar básica.
Carmen Lyra, un camino definido
Pasó a formar parte del Partido Comunista en 1931. Convirtió en realidad el Sindicato Único de Mujeres Trabajadoras y propuso la creación de la Organización de Maestras Costarricenses. Colaboró en el periódico Trabajo, órgano del Partido Comunista, y publicó artículos en La Hora y en La Tribuna.
En 1933, arraigada a sus ideales políticos, Carmen Lyra pronunció una serie de discursos en los que actuó en contra del gobierno de Costa Rica. La reacción no se hizo esperar. Considerada ya como una mujer muy peligrosa fue expulsada de la Escuela Maternal Montessoriana y destituida del Magisterio Nacional.
Maestra, escritora, activista política y gran observadora de la condición humana anticipó posiciones y concepciones que se enraizarían en el pensamiento de las generaciones venideras.
Pero no se rindió. Desde el periódico El Trabajo continuó denunciando la corrupción del gobierno, que ya no sabía qué hacer para callarla. Fue la primera mujer que se desplazó a la zona bananera tras la huelga (1934) que consiguió paralizar a más de 15.000 trabajadores.
Hacia el exilio
En los años 40 la Administración de Calderón, el Partido Comunista y la Iglesia formaron una trilogía que revolucionó la estructura social de la época. Tras una breve Guerra Civil, en la que Carmen Lyra participó, se expulsó del país a los calderonistas y a los comunistas por considerarlos peligrosos para el orden público.
Carmen Lyra se convirtió en la mujer más perseguida de Costa Rica. En 1948 se vio obligada salir del país. Solicitó asilo político en México. Un año después, enferma y sintiendo que le fallaban las fuerzas pidió permiso para regresar a Costa Rica. Quería morir en su tierra. El gobierno se lo denegó.
Se que voy a morir, pero quiero estar por última vez en mi tierra, no quiero morir lejos de ella». Carmen Lyra.
Carmen Lyra falleció en el exilio el 14 de mayo de 1949. Su cuerpo fue velado en México en la Confederación de Trabajadores Latinoamericanos. Sus restos mortales se trasladaron a Costa Rica el 20 de mayo. El 22 de mayo de 1949 se procedió a darle sepultura en el Cementerio General de San José.
Reconocimientos
- Se inauguró en San José, en la planta baja del Kiosco del Parque Central, la Biblioteca Infantil Carmen Lyra (1971).
- En 1976 la Asamblea Legislativa la declaró Benemérita de la Cultura.
- La Asamblea Legislativa la declaró Benemérita de la Patria en el año 2016.
Libro recomendado: Relatos escogidos
1El Edificio Metálico es un edificio patrimonial ubicado en San José. Construido entre 1893 y 1895 es una de las instituciones de educación primaria más antiguas de Costa Rica.